lunes, 24 de diciembre de 2012

Código Deotológico

 


Código Deontológico

Fecha: 20/12/12

Trabajamos el código de ética profesional a través de la elaboración de un mapa conceptual. Esta herramienta didáctica está representada por objetos de aprendizaje relacionados por conectores. Al observar un mapa conceptual debe apreciarse la síntesis y la organización de la información para una mayor comprensión del tema a tratar, su construcción debe ser armoniosa.

Algunos de los programas que permiten crear mapas conceptuales son los siguientes:


  • CMapsTools: para la elaboración del mapa se requiere de la instalación del programa en el ordenador, sólo se pude abrir con el propio archivo y a la hora de exportar se hace en formato Jpg.
  • Mindmeister: permite la elaboración de mapas conceptuales en el que se puede trabajar de manera colaborativa.
  • SpicyNodes: se conforma como un mapa conceptual dinámico. Requiere registro para empezar a usarlo y es gratuito.




Código de ética

El código de ética profesional está dividido en cuatro fragmentos: preámbulo, compromiso con las personas, compromiso con la sociedad y compromiso con la profesión.

El apartado de preámbulo se menciona que este documento tiene como meta ayudar a los miembros de manera individual y colectiva para promover en ellos un nivel de conducta profesional adecuado, así como construir documentación de opinión relacionada con los enunciados éticos específicos y por último enuncia que las opiniones se pueden generar en respuesta a una petición  presentados ante el comité.

Para la comprensión del código de ética se organizo el grupo en equipos de tres personas, a cada equipo se le asigno una de las secciones del código (compromiso con las personas, compromiso con la sociedad y compromiso con la profesión) http://www.aect.org/About/Ethics.asp compañeras de un equipo mando la invitación a un integrante de los otros equipos para la creación de un mapa grupal en el programa de mindmeister. Finalmente se opto por crear un mapa por equipo en Cmaps Tools.

1. Compromiso Individual 



2. Compromiso con la Sociedad





3. Compromiso con la Profesión



Resumen Realizado por:

Lara Roríguez Rodríguez

Ma Nelle Medina Macías

Sergio Montero García

domingo, 16 de diciembre de 2012

Floridi. La ética informacional.





Desde el punto de vista de Floridi, cuando hablamos de ética de la información no nos referimos a un tema de bondad o maldad sino que tiene que ver con la consideración de los sujetos. Para Floridi, desde que el hombre nace o existe ya es merecedor de respeto moral porque ya es un objeto portador de información.

Floridi se basa en una ética semejante a la ecológica pero da un paso más allá: la infoética. La ética ecológica trata de observar el medio ambiente, sin embargo, Floridi  establece que el entorno en la infoética son objetos informacionales, hasta ahora sólo se habla de éticas parciales (recursos, productos y procesos).

Él trata de hablar del relativismo moral, intenta diferenciar la moral de la ética, no haciendo posible que existan unas reglas o código ontológico a las que haya que seguir. Existen unos principios inherentes a las personas, tienen que ver en su relación y a su contexto. Es una ética, no una moral ni un código deontológico; la ética va más allá, trata de ver cómo un ente se posiciona frente al mundo y frente a sus congéneres.

Si se trata de poner reglas a la hora de manejar y de mover la infosfera o las nuevas tecnologías se encuentra un mundo tan inmenso que no se podría abordar por eso es importante la ética y la entropía.






Floridi reconoce que su filosofía es difícilmente aplicable a la realidad, pero sí introduce un plano diferente de lo que ocurre. En su propuesta intervienen agentes y pacientes. Esto es, entes que funcionan de forma activa y entes informacionales que sufren las consecuencias de los otros.



Se plantea a nivel teórico que haya una ética común. En cuanto al aspecto ecológico, no es cuestión de maldad o bondad, sino que hay un daño de alguien promueve y otro que lo recibe.


Principios fundamentales de la ética informacional:
- No debe causarse entropía en la infosfera (ley de omisión).
- Se debe evitar la entropía en la infosfera.
- Se debe eliminar la entropía de la infosfera.
- Se debe promover la prosperidad de las entidades informacionales.


 De acuerdo a esta filosofía, se ha de tener como objetivo el progreso de toda la infosfera conservando, cultivando y enriqueciendo sus propiedades. Esta percepción, trasladada a la educación, podría significar que hemos de perseguir que los alumnos crezcan sanos y felices. Por otro lado, si nos referimos al ámbito ecológico, encontraríamos el sentido habituándonos al término de entropía de la infosfera.


“El discurso ético de la ética informacional involucra a toda entidad, entendida desde el punto
de vista informacional, es decir, no sólo a las personas, su cultivo, su bienestar y
sus interacciones sociales, no sólo a los animales, plantas y su adecuada vida
natural, sino a todo lo que existe, desde cuadros o libros, estrellas o piedras; todo
cuanto pueda existir o haya de existir, como las generaciones futuras; y todo lo
que fue y ya no existe, como nuestros ancestros y las antiguas civilizaciones. De
acuerdo con la EI, incluso los objetos ideales, intangibles o intelectuales tendrían,
al menos, un grado mínimo de valor moral, por muy humilde que sea, y tendrían
derecho a cierto respeto.”


El interés de esta ética radica en considerar desde un punto de vista ecológico todo lo que existe. Nuestra ideología occidental nos puede llevar a pensar que hay elementos que sobran, pero no para floridi, para el que todo tiene un sentido.



El maestro ignorante

Las primeras escuelas masivas fueron las lancasterianas. En ellas, los que más sabían enseñaban a los que menos. Se descubre que las personas son capaces de aprender cualquier cosa, siempre que dispongan de los medios adecuados para ello. La mayoría de lo que aprendemos, lo hacemos fuera de la escuela. A ésto se le conoce como aprendizaje invisible.



Eduardo de Bustos




Eduardo de Bustos nos explica que la tecnología se convierte en una herramienta de transformación social. Pues hace que la gente se cuestione cómo alcanzar el progreso, cómo valorarlo, cómo encajarlo en nuestras vidas y cómo analizarlo. La gran importancia de Floridi es intentar comprender globalmente ese problema. Esto es, por ejemplo, aprender a hacer corresponder lo biomédico con las agresiones al medio ambiente o las necesidades de obtener energía.

Todo forma parte de una idea de progreso donde las personas quedan de lado y pueden incluso ser sustituidas. El gobierno chino, por ejemplo, está compuesto por ingenieros que tienen por su condición una forma determinada de resolver las cosas. No poseen una democracia, y lo ingenieril está por encima de los seres humanos.


Podemos concluir que esta nueva necesidad a reflexionar sobre la ética hoy en día, es porque ha surgido una nueva sociedad o, ¿podríamos llamarlo una nueva realidad? Las TIC han abierto el paso a una forma de comunicación a un nuevo acceso de información y una nueva producción del conocimiento que puede hacer tambalear los valores existentes o florecer otros nuevos. Es por esto, que Floridi habla de entropía, de algo que puede destruir el mundo que nos rodea (la infosfera) por eso para él, no cabe la ética tradicionalista puesto que son insuficientes.


Los autores de este post son:

- Verónica Gutiérrez Ullate
- Jesús H. Carretero
- Mª Aránzazu González Montero

jueves, 13 de diciembre de 2012

Día 29 de Noviembre de 2012



Informacionalismo

Manuel Castells Oliván (Hellín, Albacete, España, 9 de febrero de 1942) es un sociólogo y profesor universitario, catedrático de Sociología y de Urbanismo en la Universidad de California en Berkeley, así como director del Internet Interdisciplinary Institute en la Universitat Oberta de Catalunya.

Según el Social Sciences Citation Index 2000-2009, Manuel Castells es el quinto académico de las Ciencias Sociales más citado del mundo y el académico de las Tecnologías de la Información y la Comunicación (TIC) más citado del mundo.1

Trata -entre otros temas- en profundidad sobre la Sociedad de la Información, y habla de la Teoría del Estado, como un problema de información en su obra El Estado Red.

En los últimos veinte años ha llevado a cabo una vasta investigación en la que relaciona la evolución económica y las transformaciones políticas, sociales y culturales en el marco de una teoría integral de la información, cuyo ejemplo más claro puede ser el Proyecto Internet Catalunya que coordina. Los resultados de su trabajo se recogen en la trilogía La Era de la Información, traducida a varios idiomas y que ha sido encumbrada por Anthony Giddens, asesor de Tony Blair, al nivel de los esfuerzos explicativos que Marx o Max Weber hicieron por interpretar la sociedad industrial. Si bien otros autores, más críticos, la consideran una obra que se limita a hacer un voluminoso resumen de las obras de Alvin Toffler, Yoneji Masuda, John Naisbitt, Saskia Sassen, James Martin y otros muchos, conocidos y desconocidos, que sería largo citar. Lo que sí parece ser un hecho es que Castells es actualmente uno de los autores de referencia en el campo del estudio de la Sociedad de la Información. Desde el 16 de febrero del 2006 es académico de número de la Real Academia de Ciencias Económicas y Financieras, con la medalla número 38.2 Su discurso de ingreso fue "De la función de producción agregada a la frontera de posibilidades de producción: productividad, tecnología y crecimiento económico en la era de la información".

En el texto LA INTERACCIÓ ENTRE LES TECNOLOGIES DE LA INFORMACIÓ I LA COMUNICACIÓ I LA SOCIETAT XARXA: UN PROCÉS DE CANVI HISTÒRIC Castells plantea que la forma de recombinar la información y distribuirla va a permitir cosas fabulosas a la humanidad. Intenta desde hace años buscar la explicación  del poder. Se pregunta porque la gente esta empeñada en buscar valor a lo tecnológico si esto, lo que hace es repartir el poder y no siempre como nos gustaría. Un resumen - hecho por nosotras en castellano - es el siguiente:
Vivimos en una sociedad red, es una estructura social constituida por diferentes redes de diferentes tipos facilitadas por las tic y lo explica. Las redes funcionan porque funcionan los mercados. Para los docentes nos es útil conocer como funciona la sociedad de las redes. Explica la génesis de la sociedad red, como existen redes desde los 70, redes militares puestas a disposición de las universidades para generar conocimiento científico.

A continuación vemos el vídeo de Castells y se abre un breve debate
Nuestra compañera Susana cree que hay una diferencia grande entre los que están en el poder y nosotros.
Joaquín Paredes ve dos ideas, una que asocia capitalismo y redes y otra que a él le parece que el capitalismo salvaje no es una buena forma de organizar el mundo.

Tema para el debate: la Implicación negativa y la necesidad de controlarlo.
-No es lo mismo regular la información que el dinero
-Da miedo la sobreregulación
-Los gobiernos se preocupan más por regular la red que lo económico

Después utilizamos una nueva herramienta  en lino it. Leemos el artículo y posteamos a favor o en contra La creación cultural: ideas, artistas y emprendedores. Toni Matas
Dividimos nuestros comentarios entre a favor y en contra. Y además hablamos de si se puede agrupar por temáticas.
Leemos
Y de nuevo otro texto. Lectura. Floridi, L. (2006). Ética de la información: su naturaleza y alcance. Isegoría: Revista de filosofía moral y política, 34 (Ejemplar dedicado a: Infoética: los desafíos morales de la nuevas tecnología): 19-46

Va más allá de explicar lo que se debe y no se debe hacer, lo que le hace hablar de la infosfera. Intenta explicar porque hay cosas que hacemos que no son adecuadas sin recurrir a las listas de los mandamientos.  Como hablar del mal en un mundo que es todo información, quienes son los culpables? Floridi es un autor muy seguido en España por gente muy diversa y sus ideas no han caído en saco roto.
Para finalizar hacemos un repaso sobre el posteo en el blog, la investigación y la evaluación final.

Imagen de Wikipedia

María Cortés Valladares
Rocío Espina García